< volver
29 .7 .2013
Premio Ricardo Berasategui



La quinta fecha del calendario de pista de sport e históricos abrió el día con una cada vez más competitiva actividad de endurance. El novedoso sistema de tiempo promedio tuvo gran aceptación; entre sus bondades pondera la precisión por sobre la exactitud, premiando la agudeza de la regularidad pura. La clase Sport Internacional fue prácticamente empatada entre José Visir con su BMW 635 CSI y Alberto Mieres con Cisitalia 1100; apenas 2 milésimas a favor del velocista de la GT definió la competencia, mientras que en tercer lugar se clasificaba el reaparecido Claudio Martínez con su Alfetta GTV.



:: Entrenamiento GTA - GTB - DTNH

:: Clasificación GTA - GTB
:: Clasificación DTNH

:: Final GTA - GTB
:: Final DTNH

:: Vta x Vta - Entrenamiento GTA - GTB - DTNH
:: Vta x Vta - Clasificación GTA - GTB
:: Vta x Vta - Clasificación DTNH
:: Vta x Vta - Final GTA - GTB
 :: Vta x Vta - Final DTNH

:: Clasificación endurance



Minutos antes de la salida a pista de los Sport Nacional recibimos la visita de Diego Berasategui, hijo del homenajeado Ricardo Berasategui, con quien compartimos un grato momento. El Auto Sport Nacional gozó de un destacado parque de pilotos y máquinas; pero a pesar de ello las pruebas libres previas a la competencia final debieron ser suspendidas producto de un inesperado y aparatoso despiste: el híper veloz Julián Lepphaille al volante del ultrasónico Cobra Biscayne múltiple campeón de la escalofriante Sport Super A y a su vez trotador de toda la geografía Argentina se encajó en la leca de Ascari que no distingue raza ni pedigree…

La competencia final sin reloj volvió a poner en lo más alto del podio a Agustín Mieres por segunda vez consecutiva a bordo de su Asa Monofaro con un promedio de 541 milésimas, seguido por el arquitecto Jorge Conticello en Lotus Seven y quedando tercero Emilio Tasco con su flamante Tasco 550.

Pasado el medio día se desarrollaron las habituales competencias de velocidad histórica, a las que se sumaron los modernos Fiat Línea de la Amigos Racing League. Primeramente la final del DTNH se destacó por una nutrida lucha de marcas y pilotos. El poleman, Gustavo Terrizano, debió resistir los sucesivos embates de las distintas máquinas que se alternaron el segundo lugar. Finalmente, Terrizano trajo de vuelta a la victoria a un Peugeot, seguido por el Fiat de Juan Ignacio Tosone y quedando tercero, pero con el consuelo del record de vuelta, José Zanchetta con otro 125. Al finalizar la competencia la técnica esta vez no pasó por el habitual rodillo sino por el calibre: se midió cilindrada y diámetro válvulas, confirmando la clasificación de la bandera a cuadros.

A continuación, las distintas clases del TMH agruparon una impresionante grilla de largada de casi 40 autos. La interminable fila india siguió durante casi toda la competencia a la niña bonita de la categoría: el Alfa-Romeo Giulia TI del uruguayo Díaz Magallanes. El piloto oriental no tuvo respiro hasta el final ya que la berlina 1500 de Pulenta no le perdía pisada ni tampoco el Peugeot 404 de Molinari. La aparición de resagados le sumó suspenso a la carrera, sobre todo en la última vuelta cuando un 404 de la clase light no dejó su paso a la entrada del mixto del 9 a pesar de las banderas azules agitadas, obligando al Alfa a transitar por el pasto en la viborita y luego cerrándole la cuerda a Pulenta cuando intentaba esquivarlo en el Ombú, lo que terminó en un contacto y trompo del resagado en medio del pelotón de punta. Felizmente la Giulia alcanzó una merecidísima victoria. En la clase Light el primer lugar fue para Pedro Gandulfo (h) seguido por Fabián Pons y Carlos Menéndez Behety, todos con Peugeot 404. Entre los 128 se destacó Eduardo Mallo escoltado por Paolo Gasparini.

Luz verde para la GT y José Visir no tuvo una feliz largada desde el cajón número uno, relegando algunos puestos antes del ingreso al desafiante curvón del 9. Parecía que Eliçabe volvía a escaparse en la punta, pero Visir rápidamente se puso a tiro y logró superarlo vueltas más tarde al final de la recta principal. Una vez soldado detrás de la Fuego negra, el Golf de Eliçabe le invadía los espejos a Visir e intentaba superarlo en los sectores más lentos. Mientras tanto, Jorge Lauriti se mantenía a la expectativa en un cercano tercer lugar. En la clase B, Coletti abandonaba con su Alfa y Viganó no contaba con el auto suficientemente entero como para presentarle batalla a la Alfetta de Ferioli. Promediando la competencia, Santiago Gey sufrió un vistoso despiste a la salida de Ascari luego de haberse recuperado de un desparramo en el curvón en el lanzamiento de la competencia. El auto de seguridad debió salir a pocas vueltas del final para retirar la Fuego colorada y la competencia se relanzó para el sprint final a una sola vuelta de la bandera a cuadros. Visir se alzó con la victoria redondeando un fin de semana perfecto, quedando en segundo lugar Manuel Eliçabe. En la clase B terminó en primer lugar Ferioli con su GTV.

Minutos antes de las 16.30hs se pusieron en marcha los Fiat Línea de la ARL para una competencia bastante friccionada y dejando algunos autos rotos. Los noveles pilotos de esta categoría se van familiarizando carrera tras carrera con estos vehículos y con la competición.

De esta manera concluyo un espléndido día de autódromo en Buenos Aires.

Marcelo A. Beruto