En el año 1948 un grupo de amigos, con una gran dosis de entusiasmo y locura, deciden que la mejor manera de disfrutar de sus autos sport era fundar un club.

Así nomás, como quien no quiere la cosa, arrancó una historia, que iba a resultar no solo prolongada, sino muy nutrida en grandes acontecimientos y eventos. Creo que nuestros fundadores, a los que tanto les debemos, jamás imaginaron lo que estaba iniciándose hace tantos años.

Hoy, cuando miramos atrás, vemos desde los 1000 Kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, hasta la trayectoria de Bitito Mieres en la Fórmula 1, pasando por las 1000 Millas Sport, e incluso la creación de autos realizada por socios del Club, para participar en el mismo club. Realmente parece increíble.

Hoy el CAS sigue mirando hacia su rica historia, pero enfocado como siempre en el futuro, con el automóvil sport como eje principal. Mientras haya pasión, entusiasmo, y esa pequeña dosis de sana locura que siempre caracterizó al CAS, el futuro seguramente seguirá siendo brillante.